La Shiva Shanti II es la hermana pequeña de la estratosférica Shiva Shanti. Verás que es más dulce y cariñosa, pero no te dejes engañar y pienses que es una chica débil, al fin y al cabo sigue siendo una diosa.
Necesidades cultivo
Pocas
Sensi Seeds presentó a estas dos deidades a finales de los 90, dos índicas de armas tomar, ambas dedicadas a las hijas gemelas de Ben Dronkers.
La Shiva Shanti II es un espectáculo, con unas prestaciones asombrosas y una potencia que puede mandar a la lona a todo aquel aspirante que no esté preparado.
Con la Shiva Shanti II lo que se perseguía era llegar a otro perfil no tan iniciado (ni en el consumo ni en la plantación). Se trata de un híbrido de distintas variedades: una Garlic Bud, que es una índica afgana fragante con una potencia considerable, un par de variedades afganas más y una Skunk cañera que le aporta un plus de estabilidad y vigor.
El resultado es una planta resistente que, a nada que se le preste un mínimo de atención, nos premiará con una buena producción de grandes cogollos cargados de resina. Y lo hace en unos milagrosos 45 días (que se note que es una diosa) de súper rápida floración.
El sabor es dulce o muy dulce, pero con un fondo silvestre de lavanda. Por cierto: sí que tiene un efecto más contenido que su hermana mayor, pero aunque el colocón es menos intenso sigue mereciendo la pena y está por encima del que obtienes con otras variedades.
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La Shiva Shanti II es la hermana pequeña de la estratosférica Shiva Shanti. Verás que es más dulce y cariñosa, pero no te dejes engañar y pienses que es una chica débil, al fin y al cabo sigue siendo una diosa.
