Obama, la marihuana debería ser tratada como los cigarrillos o el alcohol

Obama, la marihuana debería ser tratada como los cigarrillos o el alcohol

En una entrevista con la revista Rolling Stone, el Presidente de los Estados Unidos, Obama, habló el uso de la marihuana, debía de ser tratado como un problema de salud pública, al igual que el alcohol o el tabaco, y dijo que era insostenible el mosaico actual de leyes estatales y federales con respecto a esta droga.

La entrevista

“Mira, he sido bastante claro acerca de mi creencia, de que creo que deberíamos tratar de desalentar el abuso de sustancias”, mencionó Obama. “Y no soy alguien que crea que la legalización es una panacea (Remedio o solución que sirve para cualquier tipo de problemas). Pero sí creo que tratar esto como un problema de salud pública, de la misma manera en que tratamos al alcohol o los cigarrillos, es la manera más inteligente de lidiar con este problema”

Obama ya había hecho comentarios acerca de esto antes, en una entrevista con la revista New Yorker en el año 2014, dijo que la marihuana era mucho menos dañina que el alcohol “en términos del impacto en el consumidor individual”, más recientemente, dijo al presentador de televisión Bill Maher: “Yo pienso que vamos a tener que tener una conversación más seria acerca de cómo estamos tratando a la marihuana y nuestras leyes de drogas en general”.

La revista que hizo con la revista Rolling Stone, Obama reiteró también su posición, del que cambiar las leyes federales acerca de la marihuana, no es algo que el presidente puede hacer unilateralmente. “Críticamente, la manera en que estas clasificaciones han sido cambiado, no lo han hecho por edicto presidencial”, dijo en entrevista, “pero se hacen bien sea legislativamente o a través de la DEA (Administración para el Control de Drogas), como se podrán imaginar, la DEA, cuyo trabajo histórico ha sido hacer cumplir las leyes de drogas, no siempre estará a la vanguardia diversos temas”

La Administración para el Control de Drogas, recientemente rechazó una petición de disminuir las restricciones federales en la marihuana, citando la falta de “uso médico aceptado” de la droga y su “alto potencial para el abuso”. El Congreso puede resolver el conflicto entre las leyes federales y estatales de la marihuana, mediante la modificación de la ley de sustancias controladas, pero se ha negado a hacerlo.

Las reacciones

Los defensores de la legalización de la marihuana se han frustrado, ya que ven una falta de voluntad de parte de Obama, de utilizar su intimidador atril, para defender su causa. “Hubiera sido muy útil si hubiese tomado medidas positivas más concretas sobre este problema, antes de que llegara la hora en la que casi tuviese que desocupar la oficina oval”, dijo Tom Angell, del grupo que está en pro de la legalización de la mayoría de los tipos de marihuana, en un comunicado, y también agregó que “el hecho de que el presidente no haya presionado a la DEA para que cambien las leyes de la marihuana este año, probablemente sea una de las más grandes decepciones de la era Obama”.

Mientras que otro defensor de lalegalizacion dijo: “Algo está sucediendo que la mayoría de nosotros que nunca pensó que alguna vez ocurriría. Obama dio potestad a los estados para permitir que esto suceda. Si los Estados lo hacen ellos mismos, no hay lucha. Si Obama actuara unilateralmente, imagínense la pelea que se produciría. Habría sido una munición para los obstruccionistas, y ahora no hay ninguno y se están haciendo progresos. Es un ajedrez contra los inspectores. Claro, habría sido bueno si hubiera podido actuar, pero no creo que estaríamos donde estamos hoy si lo hubiera hecho.”

Hay un pequeño desacuerdo en ambos lados del debate de la legalización del uso personal de marihuana, acerca de si debe ser tratado como un problema de salud pública. SAM (Enfoques Inteligentes para la Marihuana por sus siglas en inglés), el grupo principal anti legalización de la nación, dijo que “busca establecer una política racional, para la posesión y el uso de la marihuana, que ya no depende únicamente del sistema de justicia penal para tratar a las personas cuyo único crimen es fumar o poseer una pequeña cantidad de marihuana”.

Desacuerdos

Pero hay un desacuerdo de vehemente acerca de cómo luciría “una política racional”. SAM apoya una política de descriminalización del uso de la marihuana, pero no una leer realización a gran escala comercial. Grupos como Marihuana Policy Project, por otra parte, presionan para la creación de mercados comerciales al estilo colorado, en donde es completamente legal comparar, vender y consumir marihuana.

Obama ha sido titubeante a lo largo de su segundo mandato para impulsar un enfoque u otro. Su Departamento de Justicia creó una política explícita que permite a los estados legalizar la marihuana como piensan que es mejor, pero él no ha hecho ningún esfuerzo para cambiar de alguna manera la prohibición federal estricta sobre la marihuana que complica cualquier esfuerzo de crear una industria legal de marihuana a un nivel nacional.

Los defensores de que se haga legal la marihuana, están preocupados, porque la política actual del Departamento de Justicia de no entrometerse en la legalización de la marihuana, puede ser revertida por la administración de Donald Trump, que ya se acerca, y está llena de duros críticos de dicha legalización. El propio Donald Trump, dijo que el asunto debe quedar en manos de los estados.

En su entrevista con la revista Rolling Stone, Barack Obama insinuó que podría hablar más del tema cuando deje su cargo. “Voy a tener la posibilidad como ciudadano de decir a donde pienso que debemos ir” con respecto a la marihuana, dijo el actual presidente de los Estados Unidos de América

Igor Vieira

Licenciado en Biología Molecular, gestor de contenidos y responsable de tienda en Experiencia Natural. Viviendo la vida, hablando de Cannabis Sativa, padre. Número de colegiado es 20787-X.