Neville Schoenmakers, el Escurridizo Rey del Cannabis
Neville Schoenmakers posa con unas placas de Hachis. Imagen revista High Times.
Los inicios de Neville Schoenmakers y el Seed Bank
Hijo de padres holandeses, Neville nació en Australia donde de niño aprendió a criar loros y entró en contacto con las leyes de Mendel. Siendo ya fumador habitual y dealer de marihuana, comenzó a trabajar en un laboratorio donde experimentó con sustancias ilegales, desde marihuana a heroína, a la cual acabó haciéndose adicto. Sus experimentos y negocios lo llevaron a varias detenciones e intentos frustrados de rehabilitación.
Neville Schoenmakers huyó de la policía y fue a Tailandia, donde su consumo se descontroló. Luego fue a Holanda, y después de años de luchar contra su adicción consiguió fondos gubernamentales de un programa de rehabilitación gracias al cual pudo unir en un proyecto sus dos pasiones: la genética y la marihuana. Neville en sus comienzos colaboró con varios colectivos, entre ellos Super Sativa Seed Club a los que dejó algunas variedades que él con otras personas habían creado. Después empezó la empresa The Seed Bank, lo que hoy se conoce como The Sensi Seeds Bank, desde ese cambio de nombre el dueño del banco es Ben Dronkers. Para alimentar su banco de semillas, Neville hizo numerosos viajes a distintos países, como Pakistán, Rusia o EE.UU. entre otros.
En Amsterdam fundó la primera empresa de venta de semillas de marihuana por correo. Empezó por el 84 poniendo un pequeño anuncio en la revista High Times y poco a poco fue distribuyendo semillas por todo el mundo. Unos años después, cuando cerró la empresa de Sam the Skunkman, Cultivators Choice, Neville compró las semillas que éste había traído desde California. Entre ellas estaba la famosa Skunk #1 que ganó la primera copa canábica otorgada por la revista High Times. Gracias a esto, Neville volvió a ganar importantes premios los siguientes años.
El Rey del Cannabis
Neville se instaló en una mansión, el Castillo del Cannabis , cerca de la frontera con Alemania donde tenía sus laboratorios, salas de cultivo y hacía sus cruces genéticos. Durante años, dos plantas completas del edificio y los invernaderos fueron el lugar elegido para inventar nuevas variedades; es donde nacieron varias de las marihuanas que degustamos hoy en día y de las que hablaremos al final de este artículo. En 1987 Steven Hager, entonces editor de High Times y creador ese mismo año de la High Times Cannabis Cup, publicó un artículo sobre Neville y eso acabó de disparar su éxito y popularidad.
Al cabo de dos años en la industria, Neville ya facturaba varios cientos de miles de dólares, pagaba impuestos y sus anuncios en revistas pasaron a ser más grandes y vistosos. Los premios, sus envíos de semillas a todo el planeta y su habilidad a la hora de seleccionar los mejores machos y hembras y obtener variedades novedosas de alta calidad impactaron el mundo canábico. Significó renovación, refinamiento y crecimiento. Todo ello le valió la reputación de Rey del Cannabis y padre de la industria holandesa de semillas.
Operación Green Merchant: acusado y fugitivo
Eran ya finales de los ‘80 cuando la DEA puso en marcha la operación “Green Merchant” para arrestar a Neville bajo 44 cargos por venta de semillas a cultivadores y agentes encubiertos, sobre todo de la zona de Nueva Orleans. En el objetivo de la DEA estaba The Seed Bank y también las revistas High Times y Sensimilla Tips, acusadas de ser parte de la conspiración de venta de sustancias ilegales. A principios de los ´90 Neville vendió el Seed Bank más su Castillo del Cannabis a Ben Dronkers, por entonces propietario de Sensi Seeds Club, y de la fusión surgió el famoso Sensi Seeds Bank .
Los cargos de la DEA contra Neville eran por haber violado la ley de sustancias ilegales de los EE.UU. distribuyendo unas 2000 semillas de marihuana, por haber hecho un uso ilegal del correo postal estadounidense, por haber conspirado para cultivar más de mil plantas de marihuana y por ser estar involucrado de forma continua en una organización criminal. La suma de todas las condenas podría significar la cadena perpetua para Neville. Afortunadamente, el gobierno holandés se negó a extraditarlo y pudo esconderse un tiempo.
En 1990 viajó a Australia para reunirse con su familia, ya que su mujer estaba embarazada. Pero al poco tiempo de haber llegado fue arrestado por la policía local a pedido de la justicia de EE.UU. Se iniciaron los trámites de extradición para poder llevar a Schoenmakers a la corte en Nueva Orleans mientras sus abogados discutían la legitimidad de la extradición alegando que las semillas de marihuana no contienen canabinoides.
Antes de que se celebrara la audiencia de extradición un juez australiano le concedió la libertad bajo fianza considerando que no era prófugo de ningún país y que llevaba casi un año preso sin haber sido juzgado por ningún crimen. En junio del '91, luego de pagar 100.000 dólares de fianza, quedó libre. Neville tenía que presentarse ante las autoridades locales 2 veces al día, pero poco duró. Después de 6 semanas en libertad bajo fianza ya no volvió.
Luego de escapar volvió a Amsterdam , donde era prácticamente imposible que lo extraditaran a los EE.UU. ya que su empresa tenía todas las licencias requeridas por el gobierno de Holanda y él mismo tenía pasaporte holandés.
De vuelta en Amsterdam
Después de dedicarse por completo a la genética durante años, en el ‘97 Neville se hizo co propietario del coffee shop Greenhouse , del barrio rojo, junto al sudafricano Arjan , a la vez que empezó a colaborar con Shantibaba, de Greenhouse Seeds. Considerando que ambos habían ganado numerosos concursos de cultivo individualmente, Neville y Shantibaba decidieron presentarse en conjunto a la High Times Cannabis Cup. Arrasaron. Ganaron todos los primeros premios con la Super Silver Haze y El Nino, y se hicieron millonarios.
Desgraciadamente lo que vino después fue un choque de egos y disputas que acabaron con el equipo. Poco después, Shantibaba creó el banco de semillas Mr. Nice Seeds. En él se usó la colección compuesta por 40 plantas de ambos (algunas de las cuales tienen unos 20 años) para crear nuevas variedades, obtener semillas y ayudar a los cultivadores. Las peleas sobre la propiedad de cada uno respecto a la genética de las plantas continúan al día de hoy.
El legado genético de Schoenmakers
Neville no solo hizo crecer el mercado de las semillas de marihuana a un ritmo vertiginoso sino que su talento y dedicación han dado como fruto algunas de las variedades más valoradas y conocidas de hoy en día. A continuación repasaremos sus creaciones más famosas, pero todas se desprenden de la Haze original, y ya desde el inicio comienzan las disputas.
Por un lado, Sam the Skunkman dice que fue él quien le vendió las semillas originales de Haze a Neville. Por el contrario, Neville siempre ha sostenido que consiguió las semillas originales de los hermanos Haze a través de un coleccionista neoyorkino que tenía las originales del '69. Sea de donde sea que Neville las consiguió, hizo un gran trabajo con ellas y obtuvo dos plantas, una Haze A, con predominancia del fenotipo colombiano y otra C, donde el thai ganaba protagonismo.
Una de las primeras variedades en destacar fue el cruce de Northern Lights #5 con Haze A, que mantenía el colocón de las sativas pero ofrecía las ventajas de producción en interior de las índicas, como por ejemplo su excelente rendimiento y cantidad de resina. De esta combinación salieron la mayoría de las variedades que posteriormente se hicieron tan famosas y que veremos a continuación.
En las ediciones de Cannabis Cup del '89 y '90 Neville ganó casi todos los premios de sativas conjugando Haze A y Northern Lights #5 con otras variedades, tales como la Hawaiian o South African Sativa. Y este mismo cruce (Haze A xNL#5), más tarde y ya en manos de Sensi Seeds, también ganó la Cannabis Cup en el '93 y '96.
La Super Silver Haze surgió como parte de su colaboración con Shantibaba a partir de finales de los '90, agregando un toque de Skunk a la combinación ganadora de años anteriores Northern Lights #5 x Haze. Apenas salir al mercado fue un éxito y consiguió el triplete al ganar el primer premio de la Cannabis Cup en el '97, '98 y ‘99, lo cual acabó de catapultarla al éxito y transformarla en legendaria.
Finalmente, en el '98 ambos crearon otra variedad, muy buena para cultivo en interior. Esta vez se hizo a partir de la Haze C, aunque incorporando también Haze A y Northern Lights #5: la Neville's Haze. Esta variedad 75% sativa destaca por su colocón cerebral, su aroma y sabor.
Si bien Neville ha continuado con su trabajo de genética canábica, en los últimos años la información sobre sus proyectos es menos clara. Lo último que se dice de Neville es que aparentemente en el año 2000 estaba entre el grupo de personas que impulsó la Fundación para la Genética Canábica, en estrecha colaboración con la Agencia del Cannabis.
Fuera de eso, seguimos escuchando los rumores de discusiones, peleas o posibles colaboraciones entre varios de los personajes mencionados, pero es difícil saber verdaderamente dónde está o a qué se está dedicando el Rey del Cannabis en estos días. Quizás nos sorprenda en breve con una nueva variedad de su creación. Pero independientemente de lo que haga ahora su legado ya ha marcado la industria para siempre:, el panorama canábico actual no podría ser tan rico ni tan refinado de no ser por Neville Schoenmakers.